Se puede decir que casi todo el mundo ha querido espiar el movil de alguien, al menos una vez en su vida, ya sea para asegurarse de que la pareja le es fiel, de que el hijo no se junta con quien no debe o que un empleado no esté siendo atraído por la competencia.
La demanda de tecnologías para espiar a compañeros o familiares está al alza, lo cual, a su vez, genera una gran oferta.
La oferta consiste en una cantidad de aplicaciones de espionaje “legales” (dependiendo del país, en España por ejemplo no lo es, pero eso no quiere decir que no sea posible conseguirlas en la red).
Estás apps, también conocidas como stalkerware o spouseware, pueden instalarse en los dispositivos de los empleados o los miembros de tu familia por una tarifa relativamente baja.
Estas aplicaciones permanecen ocultas y mantienen a sus usuarios al tanto sobre la ubicación del dispositivo, el historial de navegación, los mensajes SMS, las conversaciones en redes sociales y demás. Incluso algunas de ellas pueden registrar vídeos o audios.
Desde un punto de vista moral, no está bien visto el uso del stalkerware, ya que se instala sin el conocimiento ni consentimiento del propietario, opera en segundo plano y tiene acceso a información muy personal. Sin embargo, estas aplicaciones no son ilegales en muchos países, aunque espiar a familiares constituye un delito enjuiciable. Por ello, los desarrolladores recurren a los vacíos legales, por ejemplo, refiriéndose a estas aplicaciones como soluciones de control parental.
No es de extrañar que la gente siga comprando estas aplicaciones técnicamente legales, aunque no sean éticas.
En este articulo verás:
El stalkerware puede filtrar tus datos
A pesar de ser legal, el stalkerware puede ser peligroso. Estas aplicaciones ponen en riesgo tanto al autor como a la víctima del espionaje.
¿Cómo transmiten estas aplicaciones los datos recopilados a la persona que los instaló?
Pues subiéndolos a un servidor al que el usuario puede acceder y filtrar los resultados. Por tanto, si decides espiar a un empleado del cual sospeches de su actividad, todos los mensajes que envíe y reciba con documentos confidenciales e información sobre proyectos, incluidos los mensajes contigo, se almacenarán en este servidor.
Si estás ansioso por conocer los secretos de la persona a la que amas, tus mensajes también irán a parar al registro. Ya anteriormente te hemos explicado como espiar un Móvil conectado a tu Wi-Fi en otro post.
Pero, teniendo en cuenta que tú eres el único con acceso a esos datos, ¿cuál es el problema? Pues que quizás no seas el único. Seguramente el desarrollador de la aplicación también pueda acceder o, peor aun, estos datos confidenciales pueden terminar en manos de los ciberdelincuentes o, incluso, acabar publicados.
Entonces: ¿Stalkware o control parental?
En primer lugar, muchas de estas aplicaciones no cumplen con las políticas de las tiendas oficiales como Google Play, por lo que no las encontrarás por allí. Eso significa que, en el caso de un dispositivo Android, debes aprobar la instalación de aplicaciones de terceros, lo cual, a su vez, abre la puerta al malware.
En segundo lugar, el stalkerware suele exigir muchos permisos de sistema, incluso permisos root, lo cual cede a la aplicación el control total del dispositivo, incluido el derecho a instalar otras aplicaciones.
Además, algunas aplicaciones de espionaje insisten en que se desactiven las soluciones de protección, de hecho, si se les concede el permiso, pueden encargarse ellas mismas de esta tarea.
Esta es la diferencia entre el stalkerware y las aplicaciones de control parental legales como SekureKids, las cuales no tratan de esconderse en el dispositivo o desactivar el antivirus y que, además, pueden encontrarse en tiendas oficiales.
Por ello, las aplicaciones de control parental, a diferencia del stalkerware, no suponen una amenaza para sus usuarios.
Lo primero que debe consultar son las leyes locales antes de usar una aplicación de teléfono espía.
En los Estados Unidos, se considera legal que las compañías monitoreen la actividad de sus empleados en los dispositivos de la compañía, como un teléfono celular o una computadora portátil que la compañía proporciona a sus empleados.
Los padres también tienen derecho a ver el uso del teléfono de sus hijos.
En la mayoría de las otras situaciones, necesitará un permiso específico de alguien antes de instalar una aplicación de teléfono espía.
Verifique las leyes locales para asegurarse de no estar haciendo nada ilegal.
Considere lo anterior y no olvide antes de comprar un software de teléfono espía para iOS o Android lo siguiente:
1) Tendrá que acceder al teléfono de destino: la mayoría de las aplicaciones de seguimiento del teléfono requieren acceso físico al dispositivo de destino. Por lo general, descargas la aplicación móvil en el dispositivo. O bien, descarga software de computadora y conecta el teléfono a la computadora. En cualquier caso, necesitará acceso físico al teléfono objetivo.
2) Asegúrese de que el software sea compatible con el dispositivo de destino: Algunos programas espía solo funcionan en iOS. Otro software solo funciona en Android. Otro software, funciona en ambos sistemas operativos.
Verifique el software de rastreo de su teléfono para asegurarse de que sea compatible con su dispositivo objetivo.
Puede encontrar la lista de dispositivos compatibles en el sitio web del fabricante del software.
3) Su teléfono objetivo necesita acceso a Internet: el teléfono que está rastreando necesitará una conexión a Internet, ya sea a través de una red móvil estándar o Wi-Fi. Esta conexión a Internet se utilizará para cargar datos en el tablero de la aplicación espía, lo que le permite rastrear el dispositivo de forma remota.
4) Puede que necesite rootear o hacer jailbreak a su teléfono: los dispositivos Android específicos pueden requerir rootear antes de instalar la aplicación espía. Del mismo modo, los iPhones pueden requerir un jailbreak.
Tanto el enraizamiento como el jailbreak le permiten evitar las restricciones del fabricante en el dispositivo. Al rootear o hacer jailbreak, tiene control total sobre el dispositivo y puede ver todas las acciones realizadas en ese dispositivo.
Incluso si una aplicación no requiere específicamente enraizamiento, las aplicaciones de rastreo telefónico generalmente funcionan mejor en dispositivos rooteados.
Cómo protegerte del stalkerware “legal”
Como puedes apreciar, lo mejor es pensárselo dos veces antes de instalar una aplicación de stalkerware en el dispositivo de alguien. Asimismo, te aconsejamos que sigas estas recomendaciones para que nadie pueda instalar un “regalo” de estas condiciones en tu dispositivo:
- Protege tus dispositivos con contraseñas de confianza y no las reveles nunca, ni siquiera a tus familiares.
- Bloquea la instalación de aplicaciones de terceros. Esto te protegerá contra el stalkerware y malware.
- Comprueba periódicamente las aplicaciones instaladas en tu teléfono y elimina las que no necesites. Eso también liberará memoria y reducirá el tráfico pagado.
- Utiliza un antivirus de confianza. Aunque el stalkerware se considera legal en algunos países y no se identifica como malware, muchos antivirus lo detectan y alertan a los usuarios al respecto; se refieren a él como un no-virus, un tipo de amenaza que no deberías ignorar.
¿Qué hacer si ya has sido víctima del stalkerware?
Esto es lo que debes hacer si sospechas que han instalado stalkerware en tu teléfono:
Ve a la configuración o lista de aplicaciones y observa las aplicaciones que se ejecutan en segundo plano. ¿Los reconoces a todos? De lo contrario, elimina las aplicaciones sospechosas de inmediato.
Verifica la configuración de uso compartido de tu ubicación para aplicaciones como Google Maps y Find My Friends. Es posible que alguien haya configurado previamente tu teléfono para compartir su ubicación con ellos. Si es así, cambia la configuración inmediatamente.
Si no puedes eliminar la aplicación sospechosa o no hay una aplicación, pero aún sospechas algo, es posible que debas restaurar tu teléfono a la configuración de fábrica. Sin embargo, algunos programas espía no se pueden erradicar con un simple restablecimiento de fábrica. En algunos casos, es posible que debas desechar tu dispositivo y comenzar de nuevo.
Si descubres stalkerware instalado en tu dispositivo, debes informar el problema a la policía. Y si te encuentras amenazado o en peligro por un acosador, llama a los servicios de emergencia para obtener ayuda inmediata.